Aunque no es nada raro, no deja de maravillarme ver una camada de gatos en la que hay uno muy diferente al resto.
En la última foto se ve a la madre, que, como es normal, se ponía agresiva si te acercabas a los gatitos. Tampoco es que te pudieras acercar mucho, pues escapaban.
La calle estaba en obras y por accidente abrieron ese boquete, que daba a la caseta de una huerta. Ya lo arreglaron y no sé por dónde andarán los gatitos.
Publicado el Sábado, 31 de Julio, 2010 a las 22:40. Feed RSS 2.0 de los comentarios.
You can skip to the end and leave a response. Pinging is currently not allowed.